A ver si entiendo algo. Si en Grecia ganaba la izquierda de SYRIZA, iba a ser la hecatombe, el caos, el infierno, el llanto y el rechinar de dientes. Y ganó Nueva Democracia, el partido ortodoxo y fetén, el de los “nuestros”, europeo y pro euro, dispuesto a sacrificar a los ciudadanos al dios mercado y... ¡la jodimos, tía María!
Al final la prima sube, la bolsa baja, nos acercamos a una intervención total, habrá nuevos recortes, nuevos impuestos, menos crecimiento, perdón, más decrecimiento, nos hundiremos más y hará falta un segundo rescate, más sufrimiento, más recortes, más miseria y al final unas nuevas elecciones para que gane el PP que volverá a ser la solución... acabando con el estado.
¡Pero si yo ya vi esa “peli”! Este es un déjà vu de lo ocurrido en Grecia. Cuanto de mejor grado aceptas las medidas, más medidas exige ese mercado insaciable, ese Leviatán perverso del mercado. Y si lo dejamos seguirá así hasta que las cosas vuelvan a ser como antaño, y los trabajadores sean esclavos, con o sin látigo, trabajando, si nos dan ese derecho, a cambio no de la comida, a cambio de la pitanza.
¿Hasta cuando soportaremos este engaño? ¿Es qué nadie más ve lo que hay detrás de todo esto? ¿Tan buen resultado han dado las tácticas de miedo y dominio practicadas los últimos años?
¿Es que nadie considera inaceptable que después de créditos sin límite dados a nuestro sistema bancario al 1% para que ellos nos lo presten a mucho más, ahora se les inyecten 10.000.000.000€, así, con 10 ceros (12 en pesetas) mientras no hay la misma cantidad para impulsar el crecimiento económico?
¿Pero donde coño hay alguien de izquierdas?
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