¡A pagar!

Está el PSOE presentando mociones, y en su caso adoptando acuerdos, en los ayuntamientos relativos al levantamiento de la exención de la iglesia católica y otras confesiones religiosas en el impuesto de bienes inmuebles (IBI).

Está bien la medida porque es la única que se puede aplicar desde los ayuntamientos, y hora es ya de que las cargas sean iguales para todos sin ningún tipo de privilegios. Ya debería partir de las diversas organizaciones religiosas mostrar esa solidaridad con todos los ciudadanos del país.

Dirán, claro, que eso detraerá recursos para la acción social de la iglesia. Pero no es cierto. Si en los pocos, pero notables, casos de pederastia detectados en su seno hubiesen, en su día, presentado las correspondientes denuncias ante los juzgados, desvinculándose de los responsables, no tendrían ahora tanto gasto en indemnizaciones a las víctimas.

Y decía yo que estaba bien la medida, pero me parece insuficiente. Hora es ya de revisar el famoso concordato, sino suprimirlo directamente. Porque todos debemos ser iguales ante la ley, religiones incluidas.

Nadie duda de que un local donde se realizan actividades lucrativas tiene que pagar el IBI. Pues bien. También en los centros de culto se realizan actividades económicas con carácter lucrativo. De hecho todos sabemos que cobran, y no poco, por misas dedicadas, funerales, entierros, bautismos, bodas y comisiones.

Así que, si ingresan, que paguen.

Rafa Castillo.