martes, 1 de marzo de 2011

Homenaje a Olga Novo (transcrito con algo de retraso)

Acto de homenaje a la escritora de Vilarmao Olga Novo y de descubrimiento de una placa con su nombre en la Casa de la Cultura que pasa a llamarse Casa de la Cultura Olga Novo según acuerdo del pleno del ayuntamiento de fecha 22 de agosto de 2009.

Comienza el acto en el salón de plenos de la consistorial de la Pobra do Brollón.

Intervienen sucesivamente el alcalde, Olga Novo y la 1ª teniente de alcalde.

Intervención del alcalde:

Buenos días Hoy a través de este humilde acto, pero no por ello menos importante, vamos a hacer efectivo el reconocimiento que por acuerdo plenario de este ayuntamiento, decidió que nuestra Casa de la Cultura pasa a llamarse CASA DE LA CULTURA OLGA NOVO
El secretario del Ayuntamiento da lectura al fragmento del acta de la sesión del pleno relativa a esa nominación.

Rafael Castillo Reboiro, Secretario del Ayuntamiento de A Pobra Do Brollón. (Lugo).

CERTIFICO. - Que por el pleno del Ayuntamiento en sesión ordinaria celebrada el día veintidós de octubre de dos mil nueve, se adoptó entre otros el acuerdo que transcrito literalmente dice:
1.12º.- Propuesta para poner el nombre de Olga Novo a la Casa de La Cultura.
Se da cuenta de la siguiente propuesta de los grupos nacionalista y socialista dictaminada favorablemente por la Comisión Informativa y Especial de Cuentas:
De nuestro ayuntamiento es nativa una escritora que pese a ser aún joven ha conseguido ya un amplio reconocimiento. Nadie de nuestro ayuntamiento, en el último siglo, consiguió tan alto nivel en el mundo de la cultura, ni puede representar por tanto mejor a A Pobra do Brollón, como embajadora de nuestro pueblo en el exterior. Se trata además de una persona que presume de sus raíces y no duda en presentarse en todas partes como nativa de este ayuntamiento.
Por el motivo expuesto, los grupos Nacionalista y Socialista del ayuntamiento, proponen al Pleno que adopte el acuerdo siguiente:
- Por a la Casa de la Cultura de este ayuntamiento el Nombre de Olga Novo en homenaje a dicha escritora.
El portavoz popular dice que lamenta que la propuesta no fuera consensuada con su grupo para evitar un cambio de nombre en cada cambio de gobierno. Dice qué Olga Novo tiene un currículum loable para su edad, pero es mejor que se llame simplemente Casa de la Cultura de A Pobra do Brollón. Añade que a quien si se debe reconocimiento es al doctor Calviño que no tiene ni una calle, sólo un trofeo, por lo que propone que, de poner un nombre, se ponga el suyo.
La portavoz socialista dice qué Olga Novo es una persona comprometida con Galicia y con la lengua y que puede llevar el nombre del ayuntamiento por Europa. Añade que no tiene nada contra el nombre de Calviño, pero que siendo un político puede generar rechazo en parte de la población.
El alcalde dice qué Olga Novo es una poetisa y filóloga relevante, con un currículum cultural considerable lo que no ocurre con el doctor Calviño. Añade que en el caso de porner el nombre de un alcalde habría que poner el del que hizo la Casa de la cultura, o el de Antonio Reboiro que ya en la república propuso la creación de una biblioteca. En todo caso para el doctor Calviño encajaría más ponerle su nombre al campo de fútbol.
El portavoz popular dice que el político no es el único recuerdo de Calviño que además fue diputado y en cambio poca gente conoce a Olga Novo.
El alcalde dice que no se valora la popularidad si no la trascendencia cultural. Hay que valorar y querer lo que se tiene. Dice que en todo caso el grupo popular tuvo tiempo de reconocer Calviño, pero no lo hicieron.
La portavoz socialista dice qué Calviño fue popular como político y como médico, pero que las connotaciones políticas pueden generar rechazo sean del partido que sean.
Sometida la votación la propuesta del P.P. de dejar sin nombre concreto la Casa de la Cultura, es rechazada con los cuatro votos a favor de los concejales del grupo popular y los seis en contra de los grupos socialista y nacionalista.
Sometida la votación la propuesta de los grupos socialista y nacionalista es aprobada con las dos abstenciones de las concejalas del grupo popular Páez Figueiras y López González, los dos votos en contra de los restantes concejales de dicho grupo, y los seis votos a favor de los grupos socialista y nacionalista.
Así resulta del Acta de la Sesión a que me refiero, y para que conste a los efectos oportunos expido la presente de orden y con el visto bueno del Alcalde en A Pobra do Brollón a diecinueve de noviembre de dos mil nueve.
    Vº.Bº.
El Alcalde,

Continúa el alcalde.

A pesar de tu juventud tu currículum es suficientemente amplio, (hoy aquí no lo voy a comentar por falta de tiempo), como para considerarte la persona más relevante en el ámbito cultural que nació en nuestro ayuntamiento en el ultimo siglo.
Pero como no podía ser menos, defiendes también nuestra lengua, que es lo que nos diferencia, lo que nos hace ser lo que somos, nuestro motivo de orgullo, nuestro gallego para el cual no corren tiempos muy buenos hoy en día.
Y por sí esto fuese poco también haces patria llevando tu Vilarmao natal y tu ayuntamiento en el corazón, como así si refleja en tu obra, en tu día a día, no olvidando de dónde vienes, donde naciste, conservando esa humildad, valor que desde mi punto de vista califica a una persona de bien como eres tú.
Cuanto hay que agradecerle a tu familia, a tus padres (Jaime y Olga), a tus hermanos, a Vilarmao, la escuela, los vecinos, en definitiva a tu entorno que seguro que contribuyó a despertar y acentuar en ti esa sensibilidad que ya llevabas dentro.
Pues muchas de esas personas que forman parte de tu entorno más próximo están hoy aquí, orgullosos. Un orgullo que también comparten los ciudadanos de A Pobra representados por mí, orgullo de tener entre nosotros a una persona con los valores y las capacidades que tú posees, que fue lo que nos llevó a tener este acto de reconocimiento para que tu nombre en lo sucesivo denomine un lugar tan importante como nuestra Casa de la Cultura.
Ese lugar desde donde se tiene que extender lo que somos como pueblo, el lugar desde donde tenemos que presumir, del que somos, generando la autoestima necesaria y transmitirlo a quien no puede o no quiere ver que la cultura entendida como el conjunto de actos humanos en una determinada comunidad es la que nos define como pueblo, y debe ser motivo de orgullo para todos los que a ella pertenecemos, por eso estamos felices de que una persona como tú que transpira la cultura y que defiendes y presumes de ella le des nombre a este edificio.
Estamos encantados de que hayas aceptado nuestra propuesta para honrar con tu nombre el edificio.
Sabemos y confiamos en que el futuro que te espera es muy prometedor, y nos queremos verlo y al mismo tiempo presumir de la valía tanto profesional como personal de nuestra convecina.
El reconocimiento que hoy hacemos aquí será uno más de los muchos que te aguarden en el futuro.
ESTAMOS SEGUROS.

Intervención de Olga Novo.

PALABRAS GUÍMARAS Inauguración de la Casa de la Cultura de A Pobra do Brollón Olga Novo 30 de agosto del 2010.
Cultura: del lat. "cultura", del verbo "colere" -cultivar, labrar, podar, cuidar.
Buenos días a todas y a todos. Ante todo quiero agradecer muy sinceramente a la corporación municipal de nuestro Ayuntamiento, y en especial a la persona que lo representa, nuestro Alcalde, esta distinción que se me ofrece hoy. La recibo con la emoción de quien recibe con humildad un regalo de sus vecinos.
Me siento pues muy honrada de este gesto de cariño y de reconocimiento a mi labor de escritora. Tengo que confesar que cuando se me comunicó el deseo de ponerle mi nombre a la Casa de la Cultura, me sentí al mismo tiempo emocionada y sorprendida, y mi impulso natural habría sido no aceptar esta distinción por parecerme, como me parece, que yo no soy nadie más importante que cualquier otra persona de nuestro Ayuntamiento, y que por lo tanto no merecía yo tal honor. Pero inmediatamente sentí que ese acto, este de hoy, era un reconocimiento a mi trabajo, pero al mismo tiempo símbolo de muchas otras cosas. Y por esas otras cosas también acepté ver mi nombre en una placa de hierro, yo que siempre fui contraria a ceremonias y tengo la discreción como máxima divisa. Quiero agradecer especialmente a las personas que llevaron adelante esta propuesta con ilusión y valentía, sabiendo que no todo el mundo iba a entender que se le reconozca el trabajo a una persona joven, una mujer, escritora en este caso, vecina del pequeño lugar de Vilarmao y que lleva con íntimo orgullo su lugar guímaro allá por donde va. No era fácil que se entendiera porque pesa demasiado en las conciencias la idea de que uno nunca debe ser profeta en su tierra por mucho que sea poeta en otras tierras. O que los reconocimientos deben llegar después de muerto. Yo creo en la vida y creo en las demostraciones en vida. Recojo pues este cariño que me hacéis hoy como un tesoro de afecto y de coraje, de progresismo político y de avanzadilla cultural. Nunca quise ser profeta en mi tierra pero me gusta ser poeta en ella, como lo fui siempre con o sin reconocimiento público. Porque la Poesía es de quien sabe ver la belleza del mundo y no se entretiene en luchas estériles.
Acepto este honor porque en mi nombre se le da nombre y voz a la Poesía, a la Lengua de Galicia, a la Juventud nunca reconocida, a las Mujeres artistas y trabajadoras, a las hijas e hijos de gentes humildes que pudieron tener acceso a la cultura y pueden hablar ahora de la cultura de sus padres en el lenguaje literario que siempre fue dominio de los señores y de los caciques a los que deseo que nunca le pongamos placas ni calles porque hay que dejar de servirlos. Mi nombre no es hoy mi nombre sino el de una pequeña guímara que sabe y celebra la historia de su pueblo.
Debo decir también que es una alegría para mí recibir este reconocimiento de la primera corporación municipal de izquierdas desde 1936. Quiero pues que este honor sea para los hombres de aquella corporación municipal republicana de 1936 que perdieron la vida, la libertad y los sueños a manos de asesinos fascistas y colaboradores a veces tan próximos como los propios vecinos.
Porque yo creo firmemente en la vida, en la libertad y en los sueños. Porque lo creo, en el diálogo y en la paz, más allá de la política. Porque creo en la cultura, en el saber y en la educación por encima de cualquier signo ideológico. Por eso trabajaron aquellas personas que aún no tienen nombres de calles ni de plazas y que merecerían tener sus nombres inscritos en una placa de hierro fundido para evitar que desaparezcan de la memoria a veces tan interesadamente frágil. Pido con estas rosas [pone 5 rosas sobre la mesa y entrega la primera al secretario por ser nieto de Antonio Reboiro y el resto al alcalde en representación del pueblo] y diciendo sus nombres, la justicia de la memoria y de la dignidad para estos que fueron vecinos nuestros y que desaparecieron o fueron alejados del amor de sus madres, novias, padres, mujeres e hijos, solamente por defender la democracia frente a la tiranía:  Antonio Reboiro Rodríguez, José Casas Martínez, Dositeo Casanova Álvarez, Jesús Casas Martínez y Manuel González Incógnito, sencillos comerciantes, carpinteros o labradores como mis padres. En mi nombre están para siempre sus nombres.
Pero en mi pequeño nombre, que ahora queda en una placa de la Casa de la Cultura, están también muchos otros nombres. Está el nombre de Galicia. El nombre de la cultura gallega y de la lengua que nos es propia, para que nuestros hijos la hagan perdurar, “aunque se hunda el enlosado y caiga la nieve en el lar (hogar en el doble sentido de lugar donde se vive y de fuego familiar)”, como decía Uxío Novoneyra, poeta de las tierras próximas de O Caurel. Un nombre propio no es nada pero la Casa de la Cultura es la Casa de todos nosotros. La Cultura de aquellos que trabajaron día y noche para dar a sus hijos esta Cultura de los Libros. La Cultura de los que ordeñaron vacas, vendieron terneros, fueron a los pinos, sembraron patatas y nabos y anduvieron mojados como el barro, cogiendo tojos y recogiendo (palabra que viene a significar, si no estoy equivocado, troncos o raíces de arbustos) y palos y casi no sabían leer, pero sabían del mundo y de la tierra y todo lo que había que saber para hacer ir adelante en la vida. Sin esa cultura no somos nada. Para que sus hijos e hijas y los hijos de sus hijos no olviden de dónde vienen, quiero dejar la herencia de todos mis libros a esta biblioteca. Y que todas las puertas de esta Casa, que lleva ahora mi nombre de poeta de Vilarmao, queden Abiertas al Futuro y al Saber... Muchas gracias a todos y a todas.

Intervención de la 1ª teniente de alcalde:

Después de estas reflexiones tan profundas y completas, creo que lo mejor es quedarse con ellas.
Únicamente decir que nuestro ayuntamiento es pequeño pero tiene la suerte de tener una persona de la talla de Olga Novo, lo que es un orgullo para todos nosotros y por lo tanto susceptible de envidia sana de ayuntamientos mucho más grandes.
Es una persona tan joven y que hoy nos dijo tanto que creo que le queda aún mucho que aportar, y a nosotros, a este ayuntamiento, mucho de que presumir.
Gracias por esas palabras tan completas, preñadas de calor y vida, de reivindicación, de justicia. Unas palabras que deberían formar parte para siempre de nuestras vidas.
Desde hoy, nuestra Casa de la Cultura que lleva el nombre de Olga Novo tiene un compromiso muy grande. Tenemos nosotros el compromiso de llenarla de contenido y actividad.

A continuación todos los presentes se desplazan a la Casa de la Cultura Olga Novo donde se descubre la placa conmemorativa del acto.

Rafa Castillo.

1 comentario:

  1. !Que pena no haberme enterado de este acto cargado de emoción y de sentimiento, de fuerza y de inteligencia, de sensibilidad; pero sobre todo, de cultura y reconocimiento!
    Gracias Rafa por transmitirnos lo que no hemos podido contemplar.

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