jueves, 4 de enero de 2024

El viajero del Falcon.

 

El recurrente argumento de la extrema derecha y la derecha extrema es que Sánchez es un ocupa dispuesto a todo para vivir en la Moncloa, Veranear en Doñana y viajar en Falcon. Omiten que, si gobernase Feijoo también viviría en la Moncloa, veranearía en Doñana y, por supuesto, viajaría en Falcon. No olvidemos que Rajoy, después de una cumbre europea en la que se acordó intervenir y rescatar la economía española viajó en Falcon a un partido de la selección llevando bajo el brazo los importantes documentos oficiales del Marca.

Y es seguramente porque piensan que todos son como ellos. Lo dejó claro la exalcaldesa de Pamplona cuando al ser democráticamente desalojada de su puesto no hizo su planteamiento sobre su destino político (ejercer la oposición, trabajar para recuperar la alcaldía…) si no sobre su medio de vida, el sueldo de alcaldesa. Por eso dijo que antes de ceder a determinadas condiciones prefería dedicarse a limpiar suelos. Es cierto que el Presidente tiene un buen sueldo, aunque superado por algunos presidentes de comunidades y alcaldes de ciudades importantes. Pero por lo que yo voto no es porque el sueldo lo cobre Sánchez y no Feijoo, si no por las políticas que espero de cada uno de ellos.

Sánchez, evidentemente, pacta con todos los que necesita para gobernar. Feijoo también pacta con VOX, y lo haría sin dudarlo con JUNTS y PNV si ambos pactos fuesen compatibles. Pero, para qué?

Nuestras derechas parece que solo tienen un punto programático. Defender la Constitución? No. Defender exclusivamente el artículo 2 de la Constitución justo hasta la segunda coma. Lo de “reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran” ya depende de lo que diga VOX. Los otros 168 artículos, las disposiciones adicionales, transitorias, derogatorias y finales, si eso ya. Y el 122 .3 sobre el nombramiento del Consejo General del Poder Judicial, ya lo aplazamos sine die hasta que ellos gobiernen, y halla una oposición responsable que lo permita.

Y por qué no explican el resto de su programa de gobierno? Naturalmente porque si lo hiciesen no los votaría nadie. Basta ver sus posturas en los debates y la acción de gobierno en la CCAA y ayuntamientos que dirigen para conocerlo. Censura a la cultura, recortes en los derechos de las mujeres, colectivos LGTBI y otras minorías sociales, practica congelación del SMI y delas pensiones, recorte de la capacidad de actuación de los sindicatos, privatización de la sanidad y la educación (supresión? No. Ya dijo en una ocasión Ana Botella que no la suprimirían porque los hijos de los pobres también tienen derecho a estudiar), mejores becas para las clases adineradas y rebaja de impuestos que son mayores para los que más tienen.

Rebajar el IRPF en un punto, que supone? Para quien no tiene ingresos o tiene muy pocos, nada. Para el que gana 20.000€ un ahorro astronómico de 200€. Para el que gana 2.000.000€, una modesta propina de 20.000€. pero después, para garantizar las cuentas, suben, como hizo Rajoy, las tasas y lo copagos. Y ahí pagamos igual ricos y pobres. Porque Amancio Ortega, por mucho capital que tenga, no toma más medicamentos que los que estén en igualdad de condiciones de salud que él.

Por el contrario la izquierda en su conjunto, incluyendo los partidos nacionalistas de izquierda tan denostados por ellos, tienen un proyecto político no solo de mantener el bienestar existente, si no de ampliarlo y potenciarlo.

Antes la derecha conservaba lo que había. Incluso la Democracia Cristiana tenía una cierta política social. Y sus propios sindicatos como es el caso del PNV. Pero con el neolibaralismo de Reagan y Theatcher, empezó un fuerte y paulatino recorte del estado de bienestar. Y ahora, con las extremas derechas de los Orban, Trump, Bolsonaro, Milei, Meloni y Abascal, el estado de bienestar está en serio peligro. Y no solo el bienestar de los ciudadanos. También la democracia, las libertades, las constituciones, la paz social y la misma paz.

La unidad de España puede ser más o menos importante. Pero, y lo demás?

Rafa Castillo.

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